Una ciudad es tan grande como inversamente pueda llegar a encogerte el alma. Vamos que del dicho al hecho medie menos de una tristeza o que las puertas se abran sin querer querer (ojalá) atravesarlas.
Es un ejercicio aconsejable, aunque no exento de riego, vivir fugazmente las vidas que pasan por nuestras vidas. Una mirada ( y estás perdido).
Mientras, la ciudad crece y de repente no existe nada más: uno ha caído en el abismo, el futuro se ha borrado y lo que queda, si todavía queda algo, es la ilusión de recuperar el alma y llevarla muy lejos, tan lejos, que ni siquiera alcance a incomodarla el latir del tiempo.
Entonces sí, uno ya está preparado para otro lunes.
Entonces sí, uno puede regresar a sus miedos.
Es un ejercicio aconsejable, aunque no exento de riego, vivir fugazmente las vidas que pasan por nuestras vidas. Una mirada ( y estás perdido).
Mientras, la ciudad crece y de repente no existe nada más: uno ha caído en el abismo, el futuro se ha borrado y lo que queda, si todavía queda algo, es la ilusión de recuperar el alma y llevarla muy lejos, tan lejos, que ni siquiera alcance a incomodarla el latir del tiempo.
Entonces sí, uno ya está preparado para otro lunes.
Entonces sí, uno puede regresar a sus miedos.
Entonces sí, por fin, habremos espantado al destino.
2 comentarios:
Por una casualidad he encontrado un correo tuyo con la direccion del blog,me ha dado por entrar y OH MY GOD!! HAS VUELTO!!!, jajajaja, me alegro que sigas usando las palabras de la misma manera....
Muy Bueno Charly, soy el saimon me ha dado muy buen royo ver uqe has vuelto a escribir algo y justo antes de ayer, no se si seguiras por los madriles, pero molaria quedar algun dia y contarnos nuestras andanzas, un saludo.
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